Madrid Photocreative 2017

Foto de Antonio García.

Ha pasado ya una semana y sigo sin poder poner orden a tantas emociones.  
​Después de la genial experiencia del año pasado (que podéis leer aquí), tenía clarísimo que no iba a perderme esta edición del Madrid Photocreative, así que estaba deseando ver cuál iba a ser el cartel, que resultó ser mucho más alucinante de lo que esperaba!!!

Junto a semejante plantel, anunciaron que el workshop iba a ser impartido por Anka Zhuravleva, cuyo trabajo me enamora, y me dije que no me iba a volver a arrepentir de dejar pasar un taller, como me pasó con el de Rosie Hardy en 2016. Así que, a los 5 minutos de salir a la venta las entradas, yo ya tenía el pack completo. Sólo había que esperar un montón de meses! XD 

Llegó la fecha y, nerviosa perdida, me cargué la mochila y me reuní con un montón de gente a las que moría de ganas de poner piel y achuchar, y conocí otras nuevas personas encantadoras.  El taller duró día y medio y, personalmente, disfruté mucho viendo como trabaja Anka,  charlando con compañeros de pasión y  en el shooting con las maravillosas modelos Sara Vela, Elsa Illari e Isabella Moiseva y la estilista Carolina Rodríguez. Pronto os enseñaré las fotos que pude hacer. <3

Si la mañana de edición con Anka había sido intensa, no lo fue menos la tarde del jueves. Empezamos visitando la imperdible expo de Mara Saiz, donde nos juntamos un montón de fotógrafas a las que sigo y admiro. Y seguimos con la mega quedada organizada por varios fotógrafos youtubers, como Rebeca Saray, Fátima Ruiz, Antonio Garci y un montón de grandes más que decidieron juntarse y juntarnos en una avalancha roja.

Llegó el viernes y empezó el congreso, con unas ponencias MAGNÍFICAS. Mara y sus mujeres y sus flores. Paula R. Feito y Víctor Gente Bastarda nos mostraron su alucinante trabajo y lo grandes artistas y personas que son. Izhan y Sr Zeta nos hablaron de Instagram con su habitual desparpajo. Después de comer haciendo piña, seguimos con los intensísimos retratos de Virginia Rota, los colores de Anka y la divertidísima moda de Adriana Roslin, que fue todo un descubrimiento para mí.

Si el viernes había sido potente, el sábado fue apoteósico. Abrimos el día con el absolutamente flipante trabajo de Nekro, que nos dejó a todos boquiabiertos. Siguió Marina Gondra con sus cuidadísimos fotomontajes y, antes de irnos a comer, nos mostraron su trabajo el peculiar Gorka Arcocha y súper Fátima Ruiz, que revolucionó la sala con su energía arrolladora. La tarde nos trajo el marketing de Vicente Nadal, las risas y las lecciones de Javier Damlow y, para terminar, la guinda del festival: Brooke Shaden.
En fin, qué voy a decir de Brooke que no se haya dicho ya y que no sepáis. Es una artista increíble pero, sin duda, lo que más adoro de ella es a ella. Su pasión, su resolución, su dulzura, su generosidad. Y es que realmente es así, pero multiplicado por mil. Cercana, abierta, pura inspiración. Decidió hacer una fotografía allí mismo, usando lo que tenía. Con el mantel, unas hojas de papel y la especialísima Leila Amat como modelo, creó y editó allí mismo una de sus mágicas obras. Yo me quería morir, aquello no podía estar pasando. Al terminar su ponencia, adorable como es, pudimos hablar con ella y tuve la oportunidad de darle las gracias por haber sido un pequeño gran motor en mi trayectoria fotográfica, porconvencerme de que, si quieres, puedes.  Un día para enmarcar.

El domingo, aún en las nubes, recibimos a Cristina Otero y sus geniales autorretratos, para terminar con el mundo de las galerías de arte con Sema D'Acosta.  También fue genial poder comprar obra allí mismo, y yo no podía volver a casa sin traerme un pedacito de Yolanda García, Clara Barquín y Mia Madrid.

Cerramos el festival y llegó la hora de despedirse, pero con un "nos tenemos que ver pronto", que es lo más bonito que nace de eventos como éste. Los abrazos, los ojos brillantes, las sonrisas y las ganas.
Es maravilloso conocer artistas nuevos, es genial profundizar más en la obra de los que ya conoces, pero lo que no tiene precio es la energía que se respira cuando cientos de artistas se juntan y comparten en vez de competir, cuando se hace palpable que todos estamos allí por lo mismo: un amor profundo a crear fotografías, a contar todo lo que tenemos que contar, a  embellecer un poco nuestro mundo y, con suerte, el de alguien más. Ha sido un sentirse muy pequeñita y, a la vez, muy igual. Ha sido precioso y no pienso perdérmelo jamás. 
Quiero darle un enorme GRACIAS a Eduardo, Ana y todos los que habéis estado detrás de la organización de este evento porque ha sido absolutamente maravilloso. Que nunca nos falte el Madrid Photocreative. A todos los que habéis estado, compartido, sonreído, abrazado: gracias por hacerlo único. A los que no habéis asistido: no volváis a faltar, haced grandes estos eventos tan necesarios, no dejéis que se extingan. Nos vemos el año que viene!!! 

(Algunas fotos no son mías, sino de Pedro Martín, Bea Kurs y Lourdes Martínez, mi núcleo duro de estos días. Sois amor!!! )